La lluvia esperada llegó según la previsión, aunque fue una auténtica birria: un matapolvo que no dejó ni un litro por metro cuadrado. En fin, nos conformaremos con que no granizara.
Con la iglesia engalanada para la ocasión y el coro del Villanueva haciendo el acompañamiento, la familia de Laura e Israel celebraron a la una de la tarde la primera comunión de su hija Carmen, a la que asistieron un buen número de invitados entre familiares y amigos. Por la tarde continuó la fiesta, especialmente para los más pequeños que hicieron de ella un día inolvidable.
Felicidades familia. Es un placer teneros en el pueblo.
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| Foto de Inés Sancho García |
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